Decir adiós a amigos de toda la vida, es una tarea muy dolorosa, es el mayor dolor sentido constantemente a nuestra edad…es el de perder a nuestros amigos con los que tanto hemos compartido en nuestro viaje por nuestras vidas llenas de luchas y anhelos comunes, con nuestros éxitos y errores, en los distintos frentes de lucha y vida por nuestro pueblo, nuestras gentes y nuestra cultura.
Héctor y su hermano Dámaso estuvieron siempre en la primera línea brillante de trabajo y amor a su pueblo, nuestro pueblo.
Ahora al entrar al mundo de nuestros recuerdos de toda la vida, me quedo con el viaje que hicimos a Marruecos por lo bien que lo pasamos, coincidiendo por separado, en que sería muy bueno conocer la tierra y la cultura de nuestros antepasados de raza árabe.
La cultura siempre fue uno de nuestros destinos, en ella, Héctor nos dejó en el Carrer un brillante trabajo que enamoró a los amigos de la cultura.
Amiga Conchi y demás familia… recibid mi más sentido pésame.
AMIGO HECTOR, DESCANSA EN PAZ
Paco Mañez